Temblando, en la
soledad más inmensa, esa que esta llena de dolor y sufrimientos, esa en la que
adoras ver la lluvia resbalar por tu ventana.
Y cuando esta todo en silencio, cada sonido de gota chocando contra el
suelo o en otros charcos, es una sonido celestial, lleno de sentimientos y
melancolía que te hace recordar cada minuto, cada instante de tu vida…
Reflexionas ante tus antiguos hechos y los que cometes en este presente y
horrorizado solo esperas no volver a cometer jamás.
Puede que la soledad te abrace
en su más tenebrosa oscuridad, pero siempre hay una pequeña esperanza, de ser
alguien mejor, de poder cambiar las cosas y poder continuar con tu vida para
crear un nuevo presente, una vida nueva alejada de todo aquello que te hace
daño, pero querido amigo, nunca se esta a salvo.
Vives en una
rutina, y todo comienza a dar vueltas y
vueltas, siempre lo mismo, la misma historia, intentas cambiar, (al menos lo
intentas… ¿Lo consigues?). Te ves en
medio de un desierto, lleno de almas perdidas, sin sentido, nada tiene sentido,
ahora vuelves a caer. Tu mente, tu razón
ya no es lo que era, todo te corrompe,
no encuentras paz en ninguna parte, quizás en esa persona… si… Tan cerca
pero a la vez tan lejos. Deseas alcanzar
tus deseos más anhelados, lo deseas.